Un sueño molesto...

Abri los ojos, lo primero que pude ver fue la sangre desprenderse de mi mano derecha. No sentia nada mas que la impresion de esa imagen. En mi mano izquierda sostenia una cuchilla de color azul, la cucchilla azul de mi amiga.

¿Como llego a mi mano?¿En que momento me habia cortado tanto? No lo sabia pero no pare de hacerlo.

No me dolia, todo lo contrario, me hacia sentir bien, relajada, feliz.

Continue cortandome la mano hasta que me quede sin lugar, entonces continue por la palma. La sangre comenzo a gotear de la misma y caia en el pasto, resaltandose´por su fuerte color rojo.

De repente, algo sujeto mi mano izquierda impidiendome que continuara con lo mio.

Esa persona me quito la cuchilla y la tiro lo mas lejos posible. Me senti enojada por haber detenido mi diversion.

Alce la cara para realizar mi protesta pero me frene al ver la mirada de la persona que tenia al frente mio. Abri mi boca pero no salio ninguna palabra de ella. Solo me limite a sostenerle la mirada hasta que él la bajo para ver mis heridas.

Tomo mi mano entre las suyas, como si intentara detener el sangrado sin ningun resultado.

-¿Como pudiste hacerte esto?- pregunto mientras me arremangaba el buzo del colegio, dejando a la vista otras heridas dispersas por todo mi brazo; algunas recientes y otras ya cicatrizadas -¿Acaso me odias?¿Me queres ver sufrir?

Yo no entendia nada, ¿Que hacia él aca?
De repente me comence a marear, sentia el brazo frio por lo que me fije para ver que estaba pasando.
-Mika, ¿Mika?¿Estas bien?- escuchaba a lo lejos.
Mis ojos me pesaban, dirigi rapido la vista a mi brazo y vi como mi buzo se teñia de rojo.
En ese momento se me cerraron los ojos y perdi el conocimiento.

 

Abri los ojos de nuevo, se veia todo borroso y me dolia la cabeza. Solo pude distinguir la figura de mi mamá al lado de la cama entre toda la luz que entraba en la habitacion. ¿Donde estaba? Trate de tranquilizarme un poco para pensar con claridad.

-Mika, ¿Estas bien?¡Que susto me diste!- decia de forma apresurada pero con un tono relajado -estas en el hospital porque te desmllaste y perdiste demasiada sangre.

Yo queria saber que habia pasado con él, no que me pasaba a mi. Quise decir algo pero no pude, no sabia como expresarme.

-Ahora solo descansa.

Y cerre los ojos para volver a dormir.

Cuando desperte estaba oscuro, por lo visto ya habia anochecido. Intente sentarme pero algo me retenia, dirigi mi vista hacia mi brazo derecho y lo pude ver dujetandome para que no me moviera.

-¿Porque lo hiciste?- sonaba enojado pero triste a la vez. Sus dedos recorrian las cicatrices que tenia en el brazo. Me asuste de que las viera entonces lo aparte hacia mi, escondiendolo con mi otra mano como si realmente lo tapara por completo.

Sonrio por lo bajo, por lo visto mi acción le dio gracia.

-Ya no tenes nada que esconder, lo vi todo.

¿A que se referia con eso? Mientras yo le buscaba la vuelta el tomo mi brazo y siguio con lo que yo le habia interrumpido.

-Yo lo arreglo, vos solo descansa...